Cesar Caillet

Soy de Temuco. Estudié teatro en Santiago en la Escuela de Fernando González. Soy bastante relajado y me altero por muy pocas cosas. Soy sensible, tengo buen sentido del humor, tranquilo, creo mucho en la amistad y tengo buenos amigos pero pocos. Elegidos con pinza por mí. De salir prefiero estar con mis amigos en casa. Prefiero estar más tranquilo.

Con 30 años, titulado de abogado en Temuco -su tierra natal- con nota 6, decidió que sería actor cuando estaba en tercer año de Derecho. Y no se arrepiente de haber entrado a teatro a los 26, porque cree que tenía las cosas más que claras y no se engrupió con la carrera.

Desde chico, al estudiar música y estar en el grupo folklórico del colegio. Por supuesto que cuando tienes 12 años y piensas en estudiar teatro uno ve el lado lúdico, del juego, de hacer distintos personajes y disfrazarte. Después, cuando creces, le tomas el gusto y el peso que puede tener (porque estudiar teatro).

Mi egreso fue Calígula, en marzo del 2004. Hicimos diez funciones, las obligatorias. Fue una obra que gustó mucho. Lo pasé muy bien haciéndola y nos fue bastante bien. A través del boca a boca llegó mucha gente (primera obra de teatro).

Estando en el último año de escuela fueron los canales de televisión a invitarnos a un casting. En noviembre del año pasado me llamaron para hacer un personaje muy chiquitito en Los Pincheira, Francisco del Canto. Después de eso se presentó la posibilidad de hacer Jaime en Idolos.

Encuentro que es un privilegio hacer televisión. Hace un año que egresé y mi madrastra es Claudia Di Girólamo. La admiro y para mi es un regalo estar actuando y aprendiendo con tremendos actores.

Mi sueño es hacer de aquí hasta que me muera teatro, cine y televisión, para eso estudié. No voy a estar discriminando ninguno de los tres géneros. Lo que me enseñaron y aprendí a hacer es actuar y en cualquier medio lo haré.